lunes, 5 de octubre de 2015

PETRÓLEO

La reforma energética de Peña Nieto logra despegar en México

El Gobierno entrega tres contratos a petroleras internacionales en una subasta competida

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Reforma energética de México
Una refinería de Pemex en Tula, México. / HENRY ROMERO (REUTERS)
El petróleo mexicano ha conseguido abrir el apetito de las compañías de hidrocarburos. El Gobierno mexicano ha entregado este miércoles tres contratos para extraer petróleo en el Golfo de México. En una subasta con numerosos postores y propuestas, el sector energético mexicano ha logrado sobreponerse del lastre de la primera puja, en julio pasado, que solo arrojó un ganador. La apertura de la industria petrolera de México, que comenzó en 2013, ha sorteado en el último año un mercado mundial deprimido por la caída mundial de los precios de los hidrocarburos.
La italiana ENI International, el consorcio argentino de PanAmerican Energy y E&P Hidrocarburos, y la alianza de la estadounidense Fieldwood Energy y la mexicana Petrobal han obtenido los tres yacimientos frente a las costas de los estados de Tabasco y Campeche (sureste de México) y serán las primeras en entregar producción petrolera al Estado mexicano. "Estamos contentos, estamos satisfechos. Es un gran resultado el que hoy tenemos para México", ha dicho Juan Carlos Zepeda, presidente de la Comisión Nacional de Hidrocarburos.
Las compañías petroleras han presentado 15 ofertas y han competido por los yacimientos con las estimaciones más altas de hidrocarburos. El Gobierno mexicano calcula que obtendrá en 2018 una producción de 90.000 barriles de petróleo diarios a partir de estos tres contratos. "Podemos esperar una producción pico y nos va a permitir revertir la caída de la producción", ha explicado Lourdes Melgar, subsecretaria de Hidrocarburos. Actualmente, México tiene una producción petrolera en declive con 2,3 millones de barriles diarios, todavía en manos de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex).
Los magnates mexicanos Carlos Slim y Alberto Bailleres han mostrado por primera vez su interés en el petróleo mexicano
Las autoridades energéticas modificaron en los últimos meses las condiciones para entregar los contratos y flexibilizaron algunos de sus estatutos para incentivar la participación de las firmaspetroleras. De 14 empresas que mostraron interés en la segunda oferta mexicana, nueve se presentaron este miércoles. "Las petroleras han visto algo importante en los bloques que se han subastado, además han sido entregados a empresas muy importantes y con una gran trayectoria", comenta Jeremy Martin, director del programa de Energía del Instituto de las Américas.
ENI International —donde el Estado italiano tiene una participación del 30%— ha garantizado al Gobierno mexicano un 84% de las ganancias sobre el crudo que será extraído del yacimiento más competido de la subasta.
El consorcio argentino formado por PanAmerican Energy y E&P Hidrocarburos ha ofrecido un 70% de las ganancias para México. El grupo cuenta con una importante participación de la británica British Petroleum (BP), así como con el respaldo de la familia Bulgheroni propietaria de Bridas, la compañía argentina pionera delfracking (fractura hidraúlica) en el país sudamericano.
El cierre de la subasta ha tenido como sorpresa la puja del consorcio de la estadounidense Fieldwood Energy y la mexicana Petrobal —propiedad del empresario Alberto Bailleres— que ha ofrecido en solitario el 74% de las ganancias de su contrato al Gobierno mexicano. La empresa de Bailleres tiene entre sus expertos a Carlos Morales Gil, exdirector de la división de Exploración y Producción de Petróleos Mexicanos (Pemex), un conocedor de la región donde se encuentran estos yacimientos.
La subasta de este martes también ha sido el escenario en el que losmagnates mexicanos Carlos Slim y Alberto Bailleres han mostrado por primera vez su interés en el petróleo mexicano. Slim con Carso Oil y Bailleres con Petrobal han hecho ofertas que aunque han sido menores a las de sus competidores, han servido para tantear el terreno en el que son debutantes.
El Gobierno mexicano ha entregado hasta ahora cinco contratos para explorar y extraer hidrocarburos en el Golfo de México. En 2013, el Congreso mexicano abrió la industria energética a la inversión privada después de mantenerla bajo la tutela del Estado durante 75 años. En diciembre, México subastará los primeros yacimientos en tierra y el próximo año ofrecerá las operaciones en aguas profundas del golfo.

Japón bordea la deflación arrastrado por el petróleo

El IPC retrocedió un 0,1% en agosto respecto al mismo mes del año anterior:

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El IPC cayó en Japón en agosto por primera vez en más de dos años Un hombre mira un panel electrónico con información económica global sobre mercados. EFE/Archivo / EFE
Los datos que va ofreciendo la economía japonesa cuestionan de forma creciente la efectividad de laAbeconomía. La inflación volvió en agosto a terreno negativo, por primera vez desde abril de 2013, cuando el gobernador del Banco de Japón puso en marcha la actual política monetaria ultraexpansiva. La vuelta a la deflación parece cada vez más próxima, con el desplome del precio de las materias primas y los números rojos del PIB en el segundo trimestre. El primer ministro impulsa la Abeconomía 2.0 para intentar revertir la situación.
Ni un yen un 30% más barato que cuando Shinzo Abe llegó al poder, en diciembre de 2012. Ni una subida del IVA del 6% al 8% en 2014. Ni una política monetaria que ha expandido el balance del banco central a un ritmo anual que equivale al 16% del PIB (80 billones de yenes, unos 580.000 millones de euros). Ninguna de las herramientas puestas en marcha por el gobernador del Banco de Japón (BoJ, por sus siglas en inglés) ha servido para reactivar el crecimiento y sacar al país de la espiral deflacionista que arrastra desde hace más de 20 años.
En agosto, y por primera vez desde que Haruhiko Kuroda accedió a la presidencia del BoJ, la inflación —excluidos los precios de los alimentos frescos— cayó el 0,1%, impulsado por la debilidad de la demanda y la caída de los precios del petróleo. Las autoridades japonesas daban relevancia ayer a otro indicador menos seguido por el banco central, la inflación subyacente, que excluye alimentos frescos y el precio de la energía. Ahí sí, los precios mantienen un ritmo de crecimiento anual del 0,8%. Pero el freno en la economía china presiona a la baja los precios de las materias primas. “Las bajas expectativas inflacionistas, el decepcionante crecimiento de los salarios y el freno en la recuperación están anticipando presiones deflacionistas”, apuntaba en una nota Kohei Iwahara, de Natixis. El objetivo de situar la tasa de inflación en el 2% para septiembre de 2016 parece cada vez más irreal.

Nuevas medidas

Kuroda ha insistido en que pondrá en marcha todas las medidas necesarias para cumplir esa meta y los inversores celebraron con una subida del 1,8% en la Bolsa la previsión de que el BoJ aprobará en consecuencia nuevas medidas de estímulo en su próxima reunión de octubre.
La política monetaria parecía, hasta la fecha, el único logro real de laAbeconomía, el recetario puesto en marcha por Shinzo Abe para impulsar la economía y la inflación en Japón. Una política basada en tres flechas —política monetaria, estímulos fiscales y reformas estructurales— que no han acabado de cumplirse. Ante semejante constatación, Abe ha fijado nuevas flechas, no menos inalcanzables, aunque esta vez sin un calendario concreto.
Este jueves el primer ministro japonés revelaba sus nuevos objetivos: aumentar el PIB en 600 billones de yenes (unos 4,5 billones de euros); elevar el apoyo a las familias con niños y la reforma de la seguridad social. Tras el fracaso de su primer programa, laAbeconomía 2.0 aún debe ganarse la credibilidad del mercado.

La caída del petróleo acerca a Ecuador a la recesión

El presidente Rafael Correa admite que la economía ecuatoriana se está estancando

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Un agricultor conduce a sus ovejas en Mulaló, Ecuador. / CRIS OLIVARES  (AP)
El presidente ecuatoriano Rafael Correa admitió por primera vez que el crecimiento del país se ha estancado y podría decrecer en 2015. “Estamos revisando nuestras expectativas de crecimiento y puede ser que este año no crezcamos o decrezcamos”, dijo el mandatario. El país, cuya economía depende de la producción de petróleo, ya ha recortado 2.200 millones de dólares del presupuesto aprobado para este año debido a la bajada de más del 50% del precio del crudo. En julio, el Banco Central de Ecuador rebajó las previsiones de crecimiento para 2015 del 4,1% al 1,9%.
A Ecuador le está pasando factura la caída del precio del petróleo y el monto es tan grande que quizás le toque quedarse a barrer la cocina. Por el momento, el presidente Rafael Correa ha admitido por primera vez, ante la prensa extranjera, que la economía ecuatoriana se está estancando y puede incluso decrecer en 2015.
El país productor de crudo ha recortado ya 2.200 millones de los 36.317 millones del presupuesto aprobado a finales de 2014 para este año por la bajada de más del 50% del precio del petróleo. Aunque Correa aseguró en su día que las cuentas eran tan sólidas como para enfrentar un precio por barril de 20 dólares, esta semana se ha rendido ante una realidad que ya vaticinaban analistas económicos. “Estamos revisando nuestras expectativas de crecimiento y puede ser que este año no crezcamos o decrezcamos”, admitió el mandatario y economista de formación, tras meses acumulados con una cotización por barril de entre 40 y 50 dólares.
Un pronóstico al que ya apuntaba en julio Fausto Ortiz, exministro de Finanzas durante la primera legislatura: “No sería extraño que Ecuador registrara un crecimiento ligeramente negativo, por debajo de cero”. Entonces, el Banco Central de Ecuador rebajó las previsiones de crecimiento iniciales del 4,1% para 2015, al 1,9%, en consonancia con la cifra que también manejaba la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de Naciones Unidas (Cepal).
El bajo precio del petróleo junto con una elevada cotización del dólar estadounidense (moneda que utiliza Ecuador desde 2000) acercan el horizonte de la recesión. En el primer trimestre, el PIB del país ya cayó un 0,5% respecto al último trimestre de 2014. La cifra oficial que corresponde a abril, mayo y junio estará disponible entre finales de septiembre y octubre, pero las declaraciones de Correa apuntan a que se confirmará la recesión técnica.
Las dificultades económicas que atraviesa el país no sorprenden tampoco al sector empresarial. Roberto Aspiazu, director ejecutivo del Comité Empresarial Ecuatoriano (la asociación que representa al sector privado), tan solo reclama que el Gobierno no haya hecho oficiales las estadísticas del segundo trimestre para confirmar que en los últimos seis meses la economía del país se ha venido abajo. “Las ventas y el consumo se han reducido. Lo que importa ahora es fijarse en cómo el Gobierno de Correa va a manejar la reducción fiscal”, apunta.
La misma inquietud preocupa al exministro Ortiz ya que, dice, “no hay recursos para equilibrar el ritmo de gasto”. En una economía de 100.000 millones de dólares (PIB), con un presupuesto de 34.097 millones, ya hay que hacer un descuento de 7.000 millones menos por ingresos petroleros. Un recorte confirmado ayer por el presidente, quien deberá afrontar su primer año de crecimiento negativo desde que llegara al poder en 2007. “Ha habido trimestres de decrecimiento del PIB en 2001, 2007 ó 2009, pero nunca todo un año”, recuerda Ortiz.
Efectos del superdólar
“Ecuador es económicamente dependiente del petróleo y su modelo de crecimiento está basado en variables foráneas que no se pueden controlar”, explica Joselo Andrade, investigador del Instituto Ecuatoriano de Economía Política. Además del crudo, el país enfrenta los efectos de un superdólar.
Con un cambio medio de casi 0,90 euros por dólar este año, las actividades productivas de Ecuador pierden competitividad en el plano internacional. Es decir, el producto ecuatoriano se vuelve más caro y por eso caen las exportaciones de las que tanto depende una economía dolarizada que no puede devaluar su moneda. Algo que sí han hecho los vecinos Colombia y Perú y que ha provocado una salida de divisas a la que el Gobierno hace frente a base de restricciones a las importaciones y aumento de tasas y aranceles.
Precisamente, esta armadura comercial que ha plantado el Gobierno progresista de Correa es lo más cuestionado por la mayoría de los sectores productivos del país desde hace meses. Miguel Ángel González, vicepresidente de la Cámara de Comercio de Guayaquil, la segunda ciudad más importante del país tras la capital Quito, propone retirarlas para incentivar la llegada de inversión extranjera.
El discurso se repite como mantra en la construcción, la industria o el sector automotriz porque, según achacan, encarece los productos que se venden en el territorio, provoca una caída del consumo y debilita los negocios.
Y por si todo este contexto internacional fuera poco, el fenómeno de El Niño amenaza con volver tan fuerte como en 1997 donde las inundaciones dejaron pérdidas de 2.800 millones de dólares, según la Corporación de Fomento Andina.

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